Alohaaaaaaaaaaa to everyone!
¡Ya miércoles! Se acerca el finde peligrosamente, y digo peligrosamente porque el hecho de que lleguen nuestros queridos sábado y domingo implica que también se acercan mis días fatales de exámenes... No me preguntéis qué tal me van, en serio, no preguntéis...
Siguiendo con nuestras crónicas de pasarelas, esta vez es el turno de Giambattista Valli, que presentó ayer, el pasado 22 de enero, su colección de Alta Costura Primavera Verano 2013, en París. ¿Qué decir de estos diseños? Que, cuanto menos, son el contrapunto perfecto a la colección que presentó el año pasado.
En esta ocasión, yo definiría el desfile como una armonía cronológica que comienza con pinceladas de oscuridad y puntos góticos para desembocar, poco a poco, en una cromática mucho más lady y suave, dejando paso a la luz.
Como os comento, empieza la colección con vestidos muy negros, quizás demasiado para la temporada que presenta, con grandes cantidades de tul, cinturas marcadas estilo años 50 y melenas lacias. Y, cuando ya comenzábamos a pensar que no veríamos más que oscuridad en dicho desfile, comienza la gama de colores pastel que hicieron las delicias de todos los presentes. Vestidos más frondosos, más transpirables, de tonos claros (rosas, beige, blancos y pinceladas de amarillo) con mucho tul y piernas al descubierto. También remarcando la cintura y dejando más visible la silueta de la mujer.
Esta colección de Giambattista Valli para Alta Costura está marcada por la elegancia de las formas curvilíneas, que habíamos perdido años atrás. Una explosión del negro más puro a la luz más blanca. ¿Qué os ha parecido a vosotros?
MUUUUUUUUUUUUAK! ;)
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